GRUPO
TEATRAL: Pensamiento Viscardino (4° B)
PUEBLO DESAMPARADO
(Guion
teatral adaptado del cuento “La naturaleza del Choquemarca”, cuya autora es
Danipza Guevara Sarmiento)
PERSONAJES:
·
AQUILES ->
ARNOLD VILCA BOLÍVAR
·
MAMERTO ->
GABRIEL DELGADO AGUILAR
·
JOAQUÍN -> JUAN CARLOS FLORES HUANCA
·
CHOQUEMARCA-> LUIS BATALLANOS VILCA
·
CUCURUCHO -> LUIS
BATALLANOS VILCA
·
NARRADORA ->
SAMARA VILCA LLERENA
ACTO
I
ESCENA
I
Narradora:
Esta historia comienza en las faldas del cerro Choquemarca, donde existe un pequeño caserío, a pocos
metros del cementerio, allí vivían los hermanos Concha.
Aquiles:
Aun recuerdo que prometí regresar a visitar a uno de los hermanos Concha,
llamado Mamerto. (melancólico) La historia de Choquemarca me dejó fascinado,
muchas veces he llegado a soñar con ese cerro (se dirige a la casa de los hermanos Concha, en el trayecto se
encuentra con él).
Mamerto:
Qué tal muchacho, qué es de tu vida, a los tiempos que lo veo (lo saluda
dándole la mano, lo invita a sentarse). Escucha con atención esta historia que
te voy a narrar. Antiguamente, en las faldas de este cerro Choquemarca existía un
pequeño pueblito, el cual estaba rodeado de una maravillosa naturaleza, agua
abundante tenían, no como ahora que poco
a poco va desapareciendo.
Aquiles:
(cierra los ojos y se imagina el pueblo en la mente) qué maravilla, qué
maravilla.
Mamerto:
¿Qué es lo que te sucede?
Aquiles:
Nada,
solo me imaginada lo maravilloso que pudo ser ese pueblo.
Mamerto:
(Comienza a contar la historia) Un día cualquiera, se presentó en este pueblo un
anciano de aspecto desgarbado y deshidratado, en busca de agua y comida, pidió
ayuda a la gente y ellos le negaron y le pidieron monedas de plata.
Cucurucho:
(todo triste y cabizbajo) Agua por favor, gente del pueblo, tengo sed,
apiádense de mí, tengan compasión con este pobre viejo.
Joaquín:
El agua cuesta, viejo sinvergüenza, paga por ella.
Mamerto:
El anciano al no recibir ayuda, se marchó con rumbo desconocido, arrastrando
los pies. No había trascurrido ni un mes de lo acontecido, el agua empezó a secarse.
La población
muy preocupada por la escasez de agua decidió aclamar al Choquemarca, llegó el día
acostumbrado para hacer el ritual y entonces después de varios minutos de
oración se les presentó un hombre alto y apuesto, y les dijo:
Choquemarca:
(enojado y decepcionado) ¿Por qué recurren a mí?
Joaquín:
El agua se nos termina, las tierras no producen, no tenemos que comer, estamos
desamparados.
Choquemarca:
(con
tomo irónico) Yo recurrí a ustedes gente de poca fe y me negaron todo.
Joaquín:
Pero, jamás te presentaste ante nosotros.
Choquemarca:
Hoy los reprimo, hoy los castigo, hoy les niego todo. Recuerden aquel día que
se les presentó un anciano, que dejaron inhumanamente a su suerte, que no le
dieron ni siquiera agua para beber, por eso hoy les quito todo, las riquezas
que les dio la madre tierra.
Mamerto:
Dicha estas palabras, la luz del sol comenzó a perder fuerza, se empezó a
encapotar el cielo de nubes negrísimas como el alma de los pobladores, hasta
que cayó una fuertísima granizada.
Aquiles:
Qué castigo del Choquemarca, a toda esa gente malvada y mezquina.
Mamerto:
Sí es verdad, se lo merecían. Por eso, te digo que los cerros tienen vida,
pobre de aquel que osa meterse con ellos.
Aquiles:
(se para para retirarse) Gracias nuevamente Sr. Mamerto por contarme tan
apasionante historia. Otro día vendré a buscarlo, para que me siga contando
estas historias.
Mamerto:
Cuando quieras hijo, para eso estamos (se despiden).
FIN
sigan asi con los teatros
ResponderEliminarMuy bueno los teatros y este también me gusto mucho la historia, muy conmovedor el final
ResponderEliminarAunque los nombres un poco raros pero antiguos
ResponderEliminarRosa, antes nuestros padres, nos ponían nombres extraídos del almanaque, piña era el que tocaba un día con nombres caricaturescos de santos desconocidos o de otra índole, como por ejemplo: Niceforo, Cándido, Plutarco, Carlota, Melquiades, Mamerto, Pascuala, entre muchos otros.
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